La nutrición: jornada de los trastornos de la conducta alimentaria

Ayer se celebró la Jornada sobre los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) y que desembocó en un auténtico éxito pues el interés generado nos obligó a augmentar las inscripciones y al mismo tiempo, incorporar la aplicación streaming para poder realizar la jornada de manera online y que la gente que se haya quedado en lista de espera, no perder la oportunidad de seguir con atención cada una de las participaciones de los ponentes.

Tal y como he comentado en mi currículum, trabajo dentro del campo de la nutrición y ayer como tal, realicé una aportación nutrición vs psicología sobre dicha dicotomía.

Efectivamente, el dietista y/o nutricionista debe de conocer y tener algún mínimo de interés por la vida de la persona, pues las dietas muchas veces están sujetas a las emociones, problemas y psicopatologías que sin un buen conocimiento de ello, no será efectivo. Este punto resulta importante y en el cual, a medida que se trabaja sobre dicho campo, más se confirma dicha regla. Si carecemos de empatía y no somos capaces de entender que delante de nosotros tenemos a un ser humano que su alimentación se ve perjudicada debido a diferentes situaciones, no seremos jamás unos buenos profesionales.

Como profesional del campo, no me gusta hablar de dietas, si no de educación en nutrición. A mis clientes les enseño a comer, a saber escoger qué alimentos son adecuados y de una forma simultánea, ir modificando lentamente sus pensamientos sobre qué es bueno y qué no es.
No trabajo con planes nutricionales «restrictivos» pues la pérdida de peso exagerada en un corto plazo de tiempo dará lugar a que esa persona acabe teniendo un efecto rebote y si uno es buen profesional en la Nutrición, debe de separar lo económico de la salud y tener como único objetivo la educación de su cliente.

La economía mueve nuestra sociedad y vivimos en un mundo capitalista (no es necesario decirlo demasiadas veces para convencernos de ello). Ahora bien, podemos trabajar con complementos nutricionales, fitoterapia (personalmente, considero la fitoterapia una buena herramienta en la nutrición) pero debemos de ser coherentes y movernos con sentido común y tener un principio ético-moral en nuestro campo de actuación.

Aprender a comer es la fórmula adecuada.

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