Españolas con estrés

Vivimos en una sociedad en que el último es el perdedor y por consiguiente, vivimos en un estado de estrés constante por estar en las pri meras posiciones de la vida misma.

Pero… ¿Y el estrés en las españolas? ¿En qué medida nos afecta?

Según estudios recientes, las mujeres de nacionalidad española son las que se sienten más fatigadas y estresadas.

Vivimos envueltas de preocupaciones, sobre todo laboral. Es complejo compaginar la vida personal y familiar con la laboral y vivimos en una constante carrera de adquirir las competencias necesarias para compaginarlo todo y sobre todo, evitando en todo momento poder realizarlo sin perder una cosa u otra.

La mujer española se ve sumergida en un mar de insatisfacciones, metas a alcanzar y con el temor constante de hacer las cosas bien por tal de seguir manteniendo nuestro puesto de trabajo el día que llegue la etapa de la maternidad y familiar.

Transformamos la maternidad como un proceso en nuestra vida lleno de emociones contrarias. Somos felices sintiendo ese momento y generalmente lo necesitamos, pero el problema suscita en el momento de hacer frente a esa realidad en nuestro entorno laboral.

Esa alegría desaparece y llegan las emociones negativas, el miedo, la ansiedad, la desesperanza e incluso la rabia. Tememos “cómo lo tomarán”, si seguirnos trabajando y no será un inconveniente y hacemos planes de futuro para compaginar horarios largos e interminables con la maternidad, con sueldos bajos y que nos permita llegar a final de mes sin preocupaciones ni temores.  Tarea difícil… ¿Verdad?

Una empresa de información Nielsen constata como un 66% de las mujeres españolas se sienten estresadas, carentes de tiempo, liderando las primeras posiciones de la lista europea en estrés entre las mujeres.

Fuera de España seguimos en las primeras posiciones, situándonos en el quinto lugar después de México, Rusia, Brasil e India.

Como podemos observar, las mujeres no vivimos según nuestras necesidades vitales, si no las necesidades de la propia sociedad.

En España la situación económica no ayuda y actualmente la nueva reforma laboral, en la cual se podrá ir de contrato temporal en contrato temporal sin límites, hará que nuestra vida sea más difícil.

En el momento que una mujer decida ser madre y tenga un contrato temporal, es obvio que generalmente no será renovada, haciendo que la natalidad española siga disminuyendo y haga de nuestro país un país más viejo de lo que es.

Tememos tener hijos y en consecuencia el país no evolucionará, si prosperará, ni vendrán personas luchadoras.

El estrés forma parte de nuestra vida y conduce nuestra forma de ser, sentir y decidir.

Imagen: http://www.portalplanetasedna.com.ar/estres.htm